- Presidenta de Confederación Democrática de Profesionales Universitarios de la Salud, CONFEDEPRUS, se refirió a millonario gasto efectuado por el Minsal en software que no está usando.
Hace unos días, “El Mercurio” dio a conocer una investigación sumaria realizada en la Subsecretaría de Redes Asistenciales, dependiente del MINSAL, por la licitación a 3 años de una ficha clínica electrónica que no se está utilizando, y que ha significado un gasto de $4,8 millones de dólares en un convenio que está pronto a expirar. En el informe de Contraloría, la Subsecretaría de Redes Asistenciales asegura que el proyecto fue recibido por la administración actual «sin que se haya podido concretar su utilización en atención a la falta de antecedentes sobre el mismo». Con este dinero, equivalente a unos $3.300 millones de pesos, la cartera de Salud pudo haber comprado, por ejemplo, 155.429 consultas de especialidad médica o 3.918 intervenciones quirúrgicas en el mismo periodo de tiempo.
Lo anterior, dentro de un contexto de desmantelamiento del sistema público de Salud, con una reforma a las isapres que busca revertir la fuga de afiliados del sistema privado a Fonasa a raíz, principalmente, de las alzas unilaterales en los planes de las aseguradoras, así como también los recortes presupuestarios y contención de gastos instruidas en hospitales. Todas, medidas que precarizan la calidad de la atención de los y las usuarias y vulneran sus derechos a la Salud, al no poderse contar con los insumos médicos necesarios ni personal para atender la alta demanda.
Al respecto Consuelo Villaseñor, presidenta de CONFEDEPRUS, señaló que “esta situación resulta lamentable, y se viene a sumar a otras que apuntan en una misma dirección, como es desmantelar la Salud Pública a través de diversas maneras, fundamentalmente mediante la reforma a las isapres. Haber gastado casi 5 mil millones de dólares en un insumo que resulta imprescindible para poder dar continuidad a la atención de los y las usuarias del Sistema Público de Salud y no haberlo usado, es un despilfarro negligente de recursos, el que sumado a los recortes presupuestarios están matando la Salud Pública y, con ello, a miles de personas que no pueden recibir la atención que necesitan debido a esta precarización de las condiciones que se requieren para poder otorgar una atención adecuada. Tenemos entendido que actualmente hay un sumario administrativo en curso, esperamos que permita esclarecer detalles de este episodio y tomar las medidas que corresponda», finalizó Villaseñor.