Santiago, 08 de marzo 2024
En el marco del Día Internacional de la Mujer trabajadora, que se conmemora este viernes 8 de marzo,
como gremio representante de las trabajadoras profesionales de la Salud centralizada en la Mesa del
Sector Público, que componen más del 70% de la dotación de profesionales en la red asistencial,
expresamos nuestra preocupación y decepción por los temas que aún siguen pendientes en relación con
las condiciones laborales de las mujeres trabajadoras de la salud, las que mantienen condiciones de
inequidad y precarización.
Existen distintos tipos de violencia hacia las mujeres, como la inequidad salarial, la carga
desproporcionada del trabajo doméstico y de cuidado no remunerado, maltrato o acoso sexual,
ausencia de garantía de acceso a cuidados infantiles, falta de seguridad funcionaria, condiciones de
trabajo precarias como los honorarios, etc. Todas, situaciones que dan cuenta de la violencia estructural
hacia las mujeres, expresada de diversas formas y en distintos espacios, tanto domésticos como
laborales.
Como gremio de un sector altamente feminizado, son materias y demandas que como
CONFEDEPRUS hemos incorporado en nuestra plataforma reivindicativa para avanzar en la construcción de una
sociedad más igualitaria y libre de violencia, junto con relevar la necesidad de una nueva y real carrera funcionaria.
En el marco de este hito político, es necesario reiterar que las profesionales requerimos una
nueva ley de encasillamiento tanto para titulares como para contratas, al menos para el 80% de la
dotación y porcentajes por grado que aseguren real movilidad y mejora en las condiciones laborales.
Actualmente, sólo un 29% de la dotación tiene acceso a carrera, porcentaje del cual apenas el 7% puede
llegar a los grados superiores.
Hemos decidido dar esta lucha de manera articulada, con unidad sindical, para avanzar en las
demandas aún pendientes para las mujeres trabajadoras de la Salud Pública centralizada, convocando a
paro nacional para el próximo lunes 11 de marzo, porque los trabajadores y en especial las trabajadoras
de la Salud no pueden seguir esperando el cumplimiento de compromisos que les permitan tener
mejores condiciones laborales, siendo éste un pilar fundamental para dar garantía de una salud digna,
oportuna y de calidad a los chilenos y las chilenas.
¡Las mujeres trabajadoras de la Salud merecen carrera funcionaria!
DIRECTORIO NACIONAL
