Intensas han sido las negociaciones durante estos días entre la MSP con el gobierno por el reajuste anual para los trabajadores y las trabajadoras del sector público, compuesto por más de 1 millón de trabajadores y trabajadoras en nuestro país y cuya finalidad es fortalecer el empleo público, tanto en condiciones salariales como aquellas tendientes a garantizar un trabajo decente que permita, a su vez optimizar, la calidad del servicio que entrega el Estado a millones de chilenos y chilenas.
En esta dirección CONFEDEPRUS, como parte de la MSP en única representación de las y los profesionales de la Salud Pública centralizada, participó hace unas semanas de la entrega del pliego en La Moneda junto con los otros 15 gremios que componen la instancia de negociación ramal más importante del país. Una propuesta con demandas transversales para el mejoramiento de las condiciones laborales del sector público, entre ellos por supuesto la Salud, por la nivelación y universalización de derechos y beneficios para el conjunto de los/as trabajadores/as del Estado, con un reajuste nominal de un 6,5 %, así como el desarrollo de Mesas de Trabajo para el año 2024 para avanzar en temas pendientes.
El fortalecimiento del sistema público de Salud en Chile y, por ende, la calidad de atención a sus usuarios y usuarias, depende en primera instancia de las condiciones laborales de sus trabajadores y trabajadoras. Para ello, se requiere de incrementos de recursos presupuestarios que sean suficientes para dar respuesta a necesidades objetivas de la población, a través de la generación de políticas públicas para el mejoramiento de las condiciones de vida de millones de chilenos y chilenas a través de la optimización del servicio público que pueda entregar un Estado más fortalecido, no sólo en cuanto temas remuneracionales o permanencia de personal que pueda garantizar la atención de la población, en el caso especifico de la Salud, sino también respecto de mejorar distintas condiciones laborales que forman parte de nuestra plataforma reivindicativa 2022-2025 en cuanto a asignaciones, aumento de cupos y turnos, modificando temas como la contratación de honorarios, teletrabajo, salud funcionaria, seguridad laboral, MALS, acceso al cuidado, trabajo pesado, jornada laboral y flexibilidad horaria, entre otros puntos. Todo lo anterior, en dirección a una verdadera carrera funcionaria, con propiedad en el empleo, estabilidad laboral, garantías de movilidad y con un nuevo Estatuto de Salud que regule los nuevos escenarios y necesidades que se han dado en estos últimos tiempos.
Es necesario robustecer las capacidades y competencias para materializar un Estado que asegure derechos sociales de manera universal. Esa ha sido nuestra lucha y demanda como gremio de la Salud, junto a la de millones de chilenos y chilenas. Para ello, es fundamental un empleo público de calidad. Sin embargo, y dentro del contexto de un proceso constituyente en el que los derechos sociales y humanos básicos, como la Salud, no están garantizados de manera efectiva por el Estado en la nueva propuesta constitucional, ni tampoco los derechos laborales, resulta relevante la defensa del empleo público y del fortalecimiento del Estado para un mejor servicio público a la gente, a las personas y, en el caso específico de la Salud Pública, a los millones de chilenos y chilenas que se atienden en ella y que conforman el 80 % de la población.